Friday, February 08, 2008



De Cambios, Miedo y Valor

Hacia tiempo que no palpaba el miedo a lo desconocido, a lo nuevo, tanto que ya me había olvidado de el, de su efecto, hasta la semana pasada cuando me descubrió adormecida en los primeros días de Enero, mordió mi espíritu sin contemplación y en menos de veinticuatro horas transformo mi seguro y cómodo mundo en un lugar incierto.
Contuve el aliento asustada de ver el abismo inmenso abriéndose paso frente a mis zapatos, profundo y desconocido…excitante.

Poco a poco regreso el valor y hasta por momentos he sabido agradecer que el miedo decidiera visitarme, (me templa el espíritu) independientemente de si me gusta o no, y mientras recojo disparates (los míos) sobre mi nueva situación le indico a mis células y a mi alocada sangre que dejen la carrera, Superaremos esto no es mas que una descarga de energía vital.

Mi proceso de adaptación a lo nuevo es casi un sistema hoy en día, aunque en mi vida adulta me he vuelto tranquila y casi, casi sedentaria, existió un momento en el que me sentía completamente nómada, vivía pegada al cambio, al desprendimiento, a lo desconocido.

“Tu nunca has sido nueva” fue lo que se le ocurrió decir a José cuando me queje por ya-ni-me-acuerdo-que “date tiempo”. He sido nueva más veces que muchas personas en toda su vida, pensé, pase la primaria en tres países diferentes y en cuatro colegios distintos y me las arregle para conservarme tímida!! Puedo con esto que comienza.

Lo que ocurre es que no espero el tiempo reglamentario, después del primer día ya todo es conocido para mí, sin contar las prisas que llevo para que todo mi entorno se adapte a la nueva rutina y compagine en mi vida.

Lo nuevo tiene prioridad, para mi la dificultad del aprendizaje, el reto de lo que no conozco, para finalmente conseguir mi ritmo interno es esencial, así que lo demás queda en una pausa preocupante, porque no se me olvida de que existe todo está ahí esperando mi atención.

Así que antes que llegara mi tiempo para dedicarme nuevamente a ese libro sobre mi mesa de noche, yo ya me preocupaba porque no podría alcanzar mi meta de treinta libros por leer de este año, ¡y recién en el inicio! , con el futuro por delante, por lo que escribí en el cuaderno pero no llegaba transcribir nunca, por anotar el diario, escribir la carta, esa parte de Silvia sufriendo.

Las rutinas de la casa se me hicieron más fáciles.

Antes del cinco de Enero elabore mi lista de propósitos para el 2.008, la parte mas gruesa se la lleva la escritura, seguro por este tiempo de pausa en que el miedo me ha tenido tan congelada que percibo miles de historias flotando y no me atrevo a tomar ninguna, reconozco que ante lo nuevo mis pensamientos florean mas rápido, sin limites y las soluciones llegan a cosas tan insólitas como darle utilidad a las dos horas de cola de las tardes…
Silvia.

5 comments:

Oswaldo Aiffil said...

...y llegó tu post aniversario preciosa! Lo estaba esperando. Gracias por premiarnos durante dos años con tus hermosas letras. Yo lo agradezco profundamente. Y te quiero mucho, mucho más que antes, aún sin haberte visto...un beso de aniversario, o dos porque son dos...

Silvia said...

Gracias Oswaldo! por visitarme,por tus comentarios,que rapido va el tiempo, lo importante es crecer con él, quien diria que llegaria a los dos años!

Gracias por celebrar conmigo y por tu cariño!!!

Un abrazo

Silvia

rominita said...

Dios mío Santo!!!, amiga querida, no me dí ni cuenta como ya pasó más de un mes desde el último post que escribí y tantisimos días más desde la última vez que me contacté contigo.
A diferencia de tí que adaptarte se te da con temor pero a buen ritmo, a mi los cambios me pillan siempre a la cola, tantisimas cosas nuevas que hacer y que afrontar se me hacen una tortuosa misión que me llevan a cobijarme entre mis mundos privados observando en mi rincón hasta desaparecer para poder ver mi proximo paso.
Te mando un gran abrazo amiga y ahorita voy a postear para salir del silencio.

Saucisse said...

Uf!! Eso que escribes me toca de cerquita!

esteban lob said...

Hola Silvia:
¿En qué 4 países pasaste tu infancia?

Cariños.